Joshua Monaghan, humildad y grandeza

Disciplina, constancia, resiliencia y pasión por el servicio son tan solo algunos de los  valores que Joshua Monaghan mantiene dentro y fuera en las barras

📸: Cortesía

En una industria tan concurrida como lo son los bares, hay quienes se han destacado por su trabajo y valor humano, por querer superarse constantemente y empujar a otros a hacer lo mismo. Joshua Monaghan, director de mixología de Zapote Bar del hotel Rosewood Mayakoba, es el vivo ejemplo de que la disciplina, el estudio, la resiliencia y el amor por lo que haces siempre rinde frutos. 

Conversar con Joshua fue todo un agasajo. Siempre con una sonrisa y ese clásico sombrero que lo caracteriza, me contó su historia, desde sus inicios, en su natal León, Guanajuato. Con más de 17 años en la industria de la hospitalidad, pues su familia se dedicó a ello, Monaghan platica que fue su tío Héctor López quien le inculcó el amor por el servicio, y a partir de ese momento, algo despertó en él.  

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Aunque de profesión es ingeniero industrial (dato importante al que ya regresaremos), la vida lo llevó al universo de los bares y los cocteles. Su primer contacto fue en Cantina Bravo, tras el cierre de los negocios familiares. Allí inició lavando la cristalería, después fue ayudante de bar y aprendió lo que se requiere para ser un bartender, aunque realmente no obtuvo el puesto como tal. En ese momento su vida daría un vuelco, pues perdió el trabajo y para sobrevivir, Joshua Monaghan utilizó su voz, pues cantó en los camiones para sobrevivir.

Por azares del destino, tiempo después, entra a trabajar a Monaghan Alternative Pub, sí, un parteaguas en su historia como el nombre lo indica, pues fue allí que tomó una decisión que ha regido su carrera: “quiero ser el mejor en esto”.

Poco a poco los ciclos de Joshua Monaghan terminaron en Guanajuato, y junto a Federico Moreno, uno de sus grandes amigos y socio, decidieron mudarse a Cancún, sin pensar que iba a ser una aventura agridulce. Al llegar a las playas paradisíacas del Caribe Mexicano no logró conseguir trabajo, ya fuera por los tatuajes o por no saber inglés, así que regresó a cantar al transporte público para subsistir. 

Sin embargo, un año después entra a trabajar a Melaza, en donde conocería a uno de sus mentores: Ricardo Orozco. Este bartender, que ya tenía una amplia trayectoria y reconocimiento, le enseñó distintas técnicas, a hacer sus propios jarabes, por ejemplo, y aquí es cuando empieza a estudiar, entrenar y buscar como mejorar todavía más: “porque quería hacer las cosas bien”. 

Joshua Monaghan

El camino de Joshua Monaghan en estas playas ha sido arduo, lleno de aprendizajes, ya que fue allí en donde inicia su travesía por el mundo de la hotelería. Primero en Hard Rock Riviera Maya, después en Xcaret y Paradisus, y al final llega a Ritz-Carlton, la que sería “una de las escuelas de la hospitalidad más fuertes que he tenido en mi vida”, me comenta lleno de orgullo. 

Fue en este hotel en donde conoce a otro de sus maestros, Bruno Lardelli, quien lo impulsó para ser mejor cada día. Para ese punto, Joshua Monaghan ya había estado en concursos, ganando algunos y otros no, pero gracias a Lardelli entra por tercera vez a World Class, en donde haría su primer coctel emblemático y presentó su sello como bartender, la técnica de throwing, y aunque quedó en segundo lugar en World Class, lo cierto es que su participación le abrió una puerta que para él, era impensable: Fifty Mills. 

Mica Rousseau, uno de los bartenders más reconocidos de México, fue quien le llamó para ser parte de Fifty Mills, bar emblemático de Ciudad de México y como Joshua Monaghan me cuenta: 

Tres años duró la aventura en en ese bar hasta que llegó la pandemia, y Joshua Monaghan, al igual que el mundo entero, tuvo que reinventarse. Dio clases en línea e impartió cátedra en la Universidad de Mixología, durante este ciclo uno de sus alumnos fue Israel Barón, campeón de World Class México 2023 y uno de los Head Bartenders de Casa Prunes, de quien está sumamente orgulloso.  

Sin embargo, el Caribe regresaría a su vida, pues mientras estaba en distintos proyectos, recibió una llamada del chef Juan Pablo Loza de Rosewood Mayakoba, quien le haría una propuesta que, de nuevo, transformaría el rumbo de su carrera. 

“El mundo Rosewood es espectacular”, me comenta, y sí, realmente lo es, sin embargo, Joshua Monaghan se había hecho una promesa que no estaba dispuesto a romper: “me prometí no liderar algo que no fuera mío”. Por supuesto, la propuesta llegó: Zapote Bar. Entre los bartenders que trabajaba en aquel bar estaba Salvador Guzman, un amigo y colega al que Monaghan admira, quiere y respeta, y que definitivamente, influyó para que aceptara el proyecto. 

“Entré a Zapote por un tema de proyecto, no de fama, ni de dinero, y entrando le di con todo, a pesar de que cambiar la mentalidad de los clásicos hoteleros fue complicado”. Y vaya que lo ha logrado. En Zapote Bar le dieron la libertad que él buscaba. Gracias a ello creó una barra con sus principios y valores, entre los que destaca el que los bartenders tengan una vida más allá del trabajo: “Hoy, 2 años 6 meses después, tenemos 19 bartenders, en lugar de solo 8 que eran cuando entré, así que ya nadie dobla turnos”. 

Hoy por hoy Zapote Bar, se rige bajo el concepto de gastrococtelería, que…

En Zapote, Joshua Monaghan no solo ha tenido ha tenido que cambiar mentalidades, formas de trabajo o contagiar la profesionalización del bartender, también ha usado lo aprendido como ingeniero industrial para llevar a cabo el trabajo administrativo que requiere su puesto. 

Y todo ese esfuerzo ha rendido frutos pues actualmente este bar ocupa el lugar número 11 de la lista de los North America’s 50 Best Bars, ha sido nominado como Mejor Bar del Caribe y él, Joshua, recibió en 2023 el reconocimiento como Mejor mixólogo Dobel. Además, forma parte de los diez Mixólogos Maestros de Tequila  Maestro Dobel. “Mi mayor logro es que en todos los hoteles quieren un bar digno y eso es lo más importante para mi porque le da oportunidad de crecer a todos mis compañeros”. 

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El camino de Joshua Monaghan ha estado lleno de retos a superar, de resiliencia, de humildad y supervivencia, sin embargo, sus ganas por apoyar a otros bartenders, hacer crecer y profesionalizar la industria así como de dejar huella en ella, lo ha llevado a que, a lo largo de los años, haya creado la Comunidad de Bartenders Bajío; la Caribbean Bartender Society; el concurso Speed Round; el primer bartender show de Guanajuato llamado Shaker Room, con sus casi recién inaugurados Shaker Awards; el concurso Duelo de Cocteles y en pandemia, junto a Ody Cruz, crearon Big Mojitos Sunday, en donde virtualmente se reunían a bartenders nacionales e internacionales para preparar esta clásica bebida. 

Sin duda, Joshua Monaghan es un vivo ejemplo de que con pasión, disciplina y amor por tu profesión se pueden lograr las metas que uno se proponga, pues la vida hay que afrontarla, y como le dijo a Israel Barón, hay que hacerlo: “siempre como un campeón”

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  • Bartender es: disciplina; amor y pasión por el servicio
  • Técnica: throwing
  • Ingrediente preferido: conocimiento
  • ¿Qué coctel eres hoy? Nova. Porque representa una nueva etapa, una nueva era, de cocteles delicados, profundos, trascendencia. Fue el último coctel que desarrollé en Fifty Mills, el sabor representa a ese Joshua tranquilo, chillón. 
  • ¿Qué sigue para la coctelería? Compartir y exhibir al mundo la riqueza que tenemos de sabores, texturas, colores y aromas a través de los tragos

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  • 📍 Zapote Bar: Carretera Tulum – Cancún Carretera Federal, Cancun – Chetumal Km 298, Playa del Carmen, Quintana Roo

Commentarios 2

  1. Rala says:

    Joshua eres grande

  2. Josue Ramírez says:

    Muchas gracias por tan bonito texto ❤️❤️❤️❤️

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