Después de leer estas curiosidades respecto a una de las bebidas más representativas de Japón, el sake, vas a querer volverte un experto
El sake, una bebida fermentada de arroz, ha despertado la curiosidad del mundo occidental y de la que poco a poco sabemos cada vez más. Esta preparación se sigue considerando sagrada en el país nipón y por supuesto, se requiere de mucho respeto y destreza tanto para elaborarlo como para servirlo.
Su origen se remonta a más de 2000 años de antigüedad, cuando el arroz llegó a Japón desde China. Con el paso de los años esta bebida se fue perfeccionando, contando hoy en día con más de 10 000 variaciones.
Actualmente, se cuentan con más de 100 tipos de arroz para elaborarlo aunque solo tres se posicionan como las variedades principales: Yamada Nishiki, Gohyaku Mangoku y Miyama Nishiki. Además, el sake posee lactobacilos, una bacteria de ácido láctico que ayuda a resolver problemas digestivos.
Por otro lado, aunque prácticamente en todas las prefecturas de Japón se elabora sake, hay algunas que se destacan por su calidad y estilos, entre ellas está la zona de Nada en Kobe, la cual se caracteriza por su potente sabor, y Niigata, que a comparación del primero es más suave.
Hoy quiero compartirte algunos datos importantes sobre esta bebida para que puedas adentrarte un poco más en ella y disfrutarla de forma consciente la próxima vez que la tomes.
1. En realidad, “sake” en japonés significa “alcohol”, por lo que el nombre correcto para referirse a esta bebida obtenida de la fermentación del arroz es “nihonshu”.
2. En Japón existen más de 200,000 variedades de arroz pero solamente 25 sirven para elaborar sake, esto se debe a que únicamente en estos, el almidón se concentra en el “shinpaku”, la parte central del arroz. En este sentido, el grano más usado se llama “sakamai” que significa “arroz de sake”, el cual tiene una gran cantidad de almidón en su interior así como grasa y proteína en su exterior; mientras que el más importante, al que consideran premium, es el “yamada-nishiki”.
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3. Para elaborarlo se necesita arroz, agua de gran calidad (manantial, ríos, fuentes o pozos) y levaduras, específicamente de una bacteria denominada koji. Además, se sabe que la mejor agua para producirlo es la que se obtiene de los mantos subterráneos de la prefectura de Hyogo, Japón.
4. Alrededor del mundo hay algunas asociaciones fuera de Japón que cuentan con certificaciones para que te conviertas en Sake Sommelier o Sommelier de Sake, es decir, un experto de esta bebida quien tiene como una de sus funciones principales, difundir la historia, propiedades, tipos y formas de beberlo a nivel mundial.
5. El sake se puede consumir frío, tibio o caliente, esto va a depender de la calidad de la fermentación, la estación del año y el gusto del consumidor.
Por otra parte, debes saber que también existen distintas vasijas para servirlo, entre las cuales aparecen:
- * “Tokkuri”. Este es un jarrón tradicional, de tamaño pequeño, el cual posee un cuello y boca angosta para mantener el calor y evitar que se evapore fácilmente.
- * “Choko u ochoko”. Recipientes pequeños en los que únicamente se sirve sake.
- * “Sakazuki”. Utilizado en ceremonias importantes como bodas, por ejemplo, este recipiente cuenta con una boca más abierta que el “choko”.
- * “Masu”. Aunque es difícil encontrarlo, no es imposible; este es de forma cuadrada y al inicio, se usaba solamente para rituales.
Como ves, el sake es una bebida compleja, llena de simbolismos y rituales dentro de la cultura japonesa, pero que definitivamente, sigue ganando adeptos de todo el mundo desde el momento en el que lo prueba.
