Pox: medicina del alma

Aunque sabemos que el pox es una bebida tradicional mexicana, su historia es más que fascinante. Acompáñanos a conocerla como medicina, su elaboración y demás usos

✍️: Zarith Reyes G.

México es bien conocido por su vasta cultura, la historia de las antiguas civilizaciones que lo han habitado y, por supuesto, la sobresaliente gastronomía nacional, y dentro de ella encontramos una importante variedad de bebidas ancestrales, entre ellas, y como el invitado de honor de este artículo, está el pox.

De acuerdo al diccionario Larousse Cocina, el pox es un aguardiente de origen maya. Su historia se remonta hace aproximadamente 2,000 años, y en la actualidad, son los pueblos indígenas descendientes de ellos quienes se han encargado de mantener viva la tradición de la elaboración y consumo de esta bebida ancestral, principalmente en los Altos de Chiapas; así, la palabra pox, en idioma tzotzil, significa “medicina”, pues las curanderas utilizan este destilado como remedio natural de diversos males.

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Por otro lado, se tenía la creencia de que esta bebida los acompañaba a lo largo de la vida, pues solían tomarla durante nacimientos y bautismos, además de que se usaba como forma de pago a la partera por su apoyo y era lo que el orgulloso padre tomaba para celebrar al nuevo integrante de la familia e incluso era aquella bebida que formaba parte de los rituales de cortejo, pues si los padres de una mujer aceptaban recibir pox por parte del caballero interesado, era porque aceptaban dar la mano de su hija en matrimonio.

De acuerdo a la práctica religiosa de San Juan Chamula en Chiapas, el pox no solamente sirve como remedio medicinal, sino que tiene propiedades que permiten conectar a los hombres con el mundo divino, siendo así una parte fundamental en los altares que realizan, además de ser consumido como bebida religiosa, personal o en rituales de sanación durante los cuales, el curandero que iba a hacer el trabajo, arrojaba un poco en la tierra, en la cruz familiar, para después esparcirlo a los cuatro puntos cardinales y finalmente, lanzarlo al viento para que lo tome el chulel, el alma del brujo.

Cabe recalcar que aunque los mayas fueron los precursores de esta importantísima bebida, fue hasta la llegada de los españoles que la receta del pox llegó a ser lo que conocemos hoy en día, pues junto con ellos llegaron el trigo, la caña de azúcar y la incorporación del proceso de destilación mediante alambique, dando como resultado la elaboración de hidromieles y chichas que eventualmente tomaron forma del pox, al que también se le conoce como posh.

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La bebida ancestral se elabora colocando en un alambique de madera agua de manantial, salvado de trigo, azúcar de caña y piloncillo, se deja reposar esta mezcla durante un día y se mueve cada dos horas con la ayuda de una pala de madera; después, se pasa a un recipiente más grande tapado con una lona de plástico donde se deja fermentar mínimo una semana (en este punto obtendremos chicha, destilado previo al pox), una vez pasada esta fermentación se almacena en barriles y se cocina sobre leña para finalmente ser destilado con la ayuda de tubos de cobre y colocados en tambos con agua de manantial.

Otros usos que tiene en la modernidad es, por ejemplo, en el municipio de Chenalhó, Chiapas durante la fiesta de San Pedro, pues se acostumbra beber en abundancia este destilado y se piensa que al recibirlo se debe agradecer porque es considerado el resultado del trabajo de la familia que lo ofrece e incluso puede ser tomado como un insulto no recibir una copa de pox durante la festividad.

La manera en la que puedes disfrutar de este espléndido destilado es vertiendo un poco en un vaso tequilero, tomarlo solo y lentamente para poder degustar todo el sabor que brinda, aunque también es posible encontrar pox de diversos sabores como coco, café, cocoa, nanche, o jamaica, con los que se pueden preparar fabulosos y originales cocteles.

Ahora que ya sabes de donde viene el pox, cómo se prepara y su importancia a nivel nacional, te invitamos a probarlo y hacernos saber cual es tu favorito.